Las primeras pinturas rupestres halladas en Europa fueron las de Altamira en 1879. Hasta entonces solo se habían encontrado restos de algunos objetos prehistóricos elaborados con piedra y hueso.

Hoy en día, podemos ver arte rupestre prácticamente por todo el mundo, pero dependiendo de sus características y la época en la que se realizó encontramos diferentes tipos.

En este post vamos a retroceder hasta la prehistoria para conocer el arte rupestre levantino que encontramos en la comarca del Maestrazgo, concretamente un conjunto excepcional: el abrigo de la Vacada. Este nos da pistas sobre las costumbres, modos de vida, creencias o pensamientos de esta primitiva sociedad.

El arte rupestre levantino se caracteriza porque aparece al aire libre, en abrigos rocosos de poca profundidad. No se sabe a ciencia cierta su origen, pero muchos autores coinciden en que se pudo desarrollar entre los años 6.000 y 4.000 a.C. Se ubica por la costa mediterránea de la península, desde Lleida hasta Almería, pero también se han encontrado manifestaciones importantes en zonas de Aragón (Huesca y Teruel) y Cuenca.

Abrigo de la Vacada

En la comarca del Maestrazgo encontramos varios yacimientos con pinturas levantinas. El primero que se descubrió fue el abrigo del Torico del Pudial en 1948. Años más tarde, en 1960, los del arquero, el friso abierto del Pudial, y la Vacada, todos en el Barranco Gómez de Ladruñán.

Este último, el abrigo de la Vacada, es uno de los que más figuras contiene de Aragón. Cuenta con un total de 75 figuras, aunque no son todas reconocibles, realizadas con pintura de colores rojo claro y violáceo.

La escena principal de este conjunto es un rebaño de bóvidos de un total de 22 figuras. En la parte derecha del abrigo se intuyen dos arqueros que acompañan al rebaño y le dan el carácter cinegético tan habitual del arte rupestre levantino. También lo acompañan otras figuras de arqueros, una femenina, y otros animales como ciervos o cabras de carácter esquemático, y un asno de aspecto bastante realista.

Como vemos, en el abrigo de la Vacada conviven tanto pinturas levantinas como esquemáticas, que, a diferencia de las primeras, son menos realistas, aunque se puede identificar con facilidad lo que tratan de representar. El acceso a este abrigo no es complicado, pero hay que caminar un rato. Se puede ir desde La Algecira tomando el sendero señalizado PR-TE 56 o desde el GR 8.1 saliendo desde Las Planas. Este último puede hacerse parcialmente en coche.

En diciembre de 1998 el Arte Rupestre del Arco Mediterráneo de la Península Ibérica fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO.

Puedes visitar el abrigo de la Vacada en 360º aquí.

¡Ven a descubrir las huellas del pasado que quedaron marcadas en el Maestrazgo!